Sistema circulatorio:
El masaje mejora la circulación sanguínea haciendo que aumente el oxígeno en el cuerpo. Ayuda a eliminar los residuos metabólicos y es beneficioso para bajar la tensión sanguínea.
Sistema digestivo:
El masaje ayuda a relajar los músculos abdominales e intestinales, mejorando de esa forma su funcionamiento.
Sistema linfático:
El masaje ayuda a mejorar la circulación de la linfa. Contribuye a la eliminación de los residuos metabólicos y estimula el sistema inmunológico.
Sistema muscular:
El masaje estimula y tonifica músculos y articulaciones, al mismo tiempo que refuerza los tejidos de unión.
Tonifica la piel:
El masaje aumenta el suministro de sangre a la piel nutriendo los tejidos y facilitando, de ese modo, la regeneración celular.
Moldear sin esfuerzo
Es un sistema efectivo para moldear la silueta, piernas, nalgas, vientre, evitar el desarrollo de la celulitis y venas varicosas. También alivia el dolor de las piernas y zona lumbar.